martes, 20 de abril de 2010

PARÁBOLA JUDÍA

Dos hombres bebían té en silencio. Al cabo de un rato, uno de ellos dijo:

- La vida es como una taza de sopa templada.

- ¿Como una taza de sopa templada…?, preguntó el otro. ¿Y por qué?.

- ¿Y yo qué sé?, respondió el primero. ¿Te has creído que soy un filósofo?.

(“Un minuto para el absurdo” A. De Mello)

A menudo, las palabras se usan para enmascarar el pensamiento, sea porque no se tiene nada que decir o porque no se quiere que otros se enteren de lo que se piensa. Si la persona que actúa así no es de confianza, lo más probable es que no se pueda contar con ella; si se trata de una amistad, es posible que esté allí donde se la necesite; y si es algo más, nunca se sabe cómo va a responder pues depende de lo que en cada momento a ella le pueda doler. Y es que, cuando alguien se acostumbra a disfrazarse para los demás, termina travistiéndose para sí misma. Por eso, es preciso comprender que el lenguaje más adecuado para expresar lo que sale de dentro es el silencio y que, cuando se aprende a aceptarse como se es, eso puede ayudar a sentirse menos sola. Al fin y al cabo, el mejor amigo del perro es otro perro porque es el único que le quiere incluso después de conocerle.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

pues... ¡a callar entonces!

Anónimo dijo...

"Las palabras como la violencia, rompen el silencio.Vienen chocando contra mi pequeño mundo.Me resultan dolorosas, me atraviesan...¿No puedes entenderlo??.
Todo lo que siempre quise, lo que necesito ,está aquí en mis brazos.
Las palabras son muy innecesarias;Solo pueden hacer daño....." ( Enjoy the silence-Depeche Mode)